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miércoles, 5 de febrero de 2014

"Las Furias: de Tiziano a Ribera"



El 22 de Enero, un día después de su inauguración en el Museo del Prado, acudimos a ver la exposición de "Las Furias: de Tiziano a Ribera" con los alumnos de 3º de Cultura Clásica y de 4º de Latín.


Fue una mañana absolutamente mitológica pues, en primer lugar, llegamos al museo dando un paseo lleno de comentarios  míticos que partió de la Academia de Medicina en la c/ Arrieta y continuó por c/ Arenal, pza. Mayor, c/ Alcalá y paseo del Prado.








En la pinacoteca nos detuvimos en varios cuadros de tema mitológico de Rubens, Veronés o Velázquez y finalmente entramos en la exposición temporal.

En su origen clásico, las Furias o Erinias eran divinidades vengadoras, una personificación de los remordimientos que no descansan ni de día ni de noche.
En España se conocieron como Furias a cuatro moradores del Hades, terrible lugar al que habían sido condenados por haber desafiado a los dioses. Eran Ticio, Tántalo, Sísifo e Ixión. 

'Ixión', de Giovanni Battista Langetti
Caronte trae a los otros tres condenados

María de Hungría había solicitado a Tiziano cuatro lienzos con estos personajes por identificarlos con los príncipes alemanes que se habían alzado contra su hermano Carlos V y a quienes éste había derrotado en Mühlberg. Es decir, eran una metáfora política y una advertencia.
Las Furias gozaron de gran popularidad puramente artística en el Barroco como vehículo para visualizar la estética del horror y demostrar el talento de los más importantes artistas pues se trataba de enormes figuras desnudas en complicados escorzos.

'Ticio' Miguel Ángel Buonarroti. 1532

En esta exposición se muestran veinticinco cuadros inspirados en estos castigos divinos, así como el infligido a Prometeo, y están dispuestos en torno a una copia del Laocoonte dentro de esta temática de exemplum artis y exemplum doloris por transmitir el dolor extremo y el sufrimiento en enormes figuras de poderosos músculos. 

Ticio: Su hígado era devorado por un buitre una y otra vez, ya que éste siempre se regeneraba, y la causa de este tormento estuvo en el intento de violación a la diosa virgen Ártemis.


'Ticio' Tiziano. 1548-1549

'Ticio' José de Ribera. 1632
Tántalo: Por descuartizar a su propio hijo Pélope y servirselo a los dioses como alimento, fue torturado con un hambre y una sed eternas pues, metido en un lago y bajo un árbol frutal, el agua y los frutos se retiraban de su boca y manos cuando intentaba darles alcance.

'Tántalo encadenado' Gian Battista Llangetti. 1650-1676
Sísifo: Capturó a Thánatos, la Muerte, por lo que la gente dejó de morir. Fue castigado a empujar una pesada roca cuesta arriba por una empinada ladera hasta que, al llegar arriba, ésta volvía a caer rodando y Sísifo tenía que volver a empezar.

'Sísifo' Tiziano. 1548-1549

Ixión: Trató de seducir a Hera, la esposa de Zeus, quien, al descubrirlo, lo envió al Tártaro donde fue atado a una rueda de fuego que no deja de girar jamás.

'Ixión' José de Ribera. 1632

Por su parte, Prometeo primero engañó a los dioses y después les robó el fuego entregándoselo a los hombres. Ellos castigaron a la humanidad enviando a Pandora, la mujer curiosa que dejó escapar del cofre todas las desgracias, y a Prometeo lo encadenaron en el Caúcaso donde un águila le comía cada día su hígado que se regeneraba por la noche. Finalmente y por no estar en el Hades, fue liberado por Heracles y perdonado por los dioses.

'Prometeo encadenado' Rubens y Frans Snyders. 1611



jueves, 30 de mayo de 2013

Solución al Enigma-14

Los suplicios por los que preguntaba la Esfinge eran los de Ticio, Tántalo, Sísifo y Prometeo, personajes míticos castigados en el Tártaro para toda la eternidad.
Ticio fue un gigante que intentó violar a Leto, madre de Apolo y Diana; éstos lo mataron con sus flechas. De inmediato Ticio fue condenado a los infiernos a un suplicio eterno: dos buitres acudían a devorarle el hígado.

                                                Ticio de Ribera (Museo del Prado)

                                                        Ticio de Tiziano (Museo del Prado)

Tántalo intentó engañar a los dioses sirviéndoles como alimento a su propio hijo Pélope. En otra ocasión, les robó  el néctar y la ambrosía, los alimentos de los que ellos se alimentaban, y los repartió entre sus amigos.
El castigo consistió en permanecer en un lago con el agua hasta la barbilla y debajo de un árbol con frutos. Cada vez que intentaba beber el agua o comer la fruta, estos se retiraban de su alcance, pero siempre  dejando a Tántalo en la permanente insatisfacción y en la permanente esperanza.


Tántalo  de Gioacchino Assereto


Sísifo se servía de su gran astucia para engañar a otros y llegó a traspasar las barreras más inviolables. Cuando Zeus raptó a la ninfa Egina, hija del río Asopo, él denunció al divino raptor al padre río a cambio de una fuente para su ciudad. Zeus, enfurecido, envió a Thánatos, la Muerte, en su busca pero con sus engaños, el hábil Sísifo logró apresar a la Muerte en su casa. Este apresamiento de Thánatos produjo un terrible desequilibrio en el mundo ya que nadie moría y para remediar la catástrofe Zeus tuvo que intervenir. 
Fue obligado a levantar con sus manos una enorme roca y a subirla por una empinada cuesta pero, a punto de alcanzar la cumbre, la piedra resbalaba y rodaba hasta el fondo de la pendiente. Sísifo tenía que volver a comenzar. 

                                                       Sísifo de Tiziano (Museo del Prado)



Prometeo fue un Titán al que se le considera creador del hombre. Cuando tuvo lugar el reparto entre hombres y dioses de unos animales sacrificados, Prometeo hizo dos porciones: en una, la carne y las entrañas disimuladas bajo la piel, en la otra, los huesos cubiertos de grasa. Zeus, creyendo que optaba por la carne, se equivocó y, furioso por haber sido engañado, decidió no volver a enviar el fuego a los hombres. Sin embargo Prometeo lo robó y se lo entregó.  Para castigar a los hombres, Júpiter envió a Pandora y a Prometeo lo encadenó al Cáucaso donde un águila constantemente acudía a devorarle el hígado. Hércules terminará  por liberarlo matando al águila.

                                                  Prometeo de Rubens (Museo del Arte.Filadelfia)

                                                          Prometeo de Ribera

Y han contestado correctamente Isabel y los alumnos:

Elam (3º ESO)
Alba (4ºESO)

Las respuestas correctas eran:
1º- Ticio
      Castigado por intentar violar a Leto
      El castigo fue que dos buitres acudieran a devorarle el hígado
      El pintor del cuadro propuesto era Ribera
2º- Tántalo
      Castigado por engañar y robar a los dioses
      El castigo fue no poder satisfacer ni el hambre ni la sed
      El pintor del cuadro propuesto era  Gioacchino Assereto
3º- Sísifo
      Castigado por apresar a la Muerte.
      El castigo fue levantar y empujar una roca cuesta arriba
      El pintor del cuadro propuesto era Tiziano
4º- Prometeo
      Castigado por robar y entregar el fuego a los hombres
      El castigo fue que un águila acudiera a devorarle el hígado
      El pintor del cuadro propuesto era Rubens 

jueves, 18 de octubre de 2012

Solución al Enigma-1






En la mitología griega, Níobe ( Νιόβη) era una hija de Tántalo y esposa de Anfión, rey de Tebas
Níobe se vanagloriaba de sus numerosos hijos, mofándose de Leto porque ésta sólo había tenido dos hijos (Apolo y Ártemis). Estas burlas llegaron hasta tal punto que se opuso a que se le tributaran honores a Leto, diciendo que ella era más digna de que se le levantasen altares. En venganza, Apolo mató a todos sus hijos varones y Artemisa hizo lo propio con las mujeres, a excepción de Amiclas (que había ofrecido una plegaria propiciatoria a Leto) y de Melibea, que al presenciar la muerte de sus hermanos adquirió tal palidez que fue llamada Cloris a partir de entonces.




Cuando la desafortunada madre acudió junto a los cadáveres de sus hijos sintió tal dolor que, deshecha en un mar de lágrimas, quedó inmóvil y terminó convirtiéndose en piedra en la que se podía ver cómo las lágrimas brotaban imparables en forma de manantial.

 Tántalo, el padre de Níobe, había cometido, por su parte,  los tres grandes pecados de la mitología griega: ofender a un anfitrión, hacer daño a un niño y desafiar a los dioses. Fue castigado en el Tártaro y su castigo  consistió en estar en un lago con el agua a la altura de la barbilla, bajo un árbol de ramas bajas repletas de frutas. Cada vez que Tántalo, desesperado por el hambre o la sed, intentaba tomar una fruta o sorber algo de agua, éstos se retiraban inmediatamente de su alcance. Además pendía sobre él una enorme roca oscilante que amenazaba con aplastarle.



Fue Anfión, el marido de Níobe, quien, con sus cánticos y su lira, hizo surgir milagrosamente las murallas y las puertas de Tebas en número de siete, como las cuerdas de su instrumento.  Layo, el padre de Edipo, le sucedió en el trono de Tebas donde, tiempo más tarde,  la cruel  Esfinge comenzó a asolar la región con sus enigmas.



Así las respuestas a  Enigma son:

1ª- La mujer es Níobe.
2ª- La castigaron los hijos de Leto y Zeus, es decir los dioses Ártemis y Apolo, matando a sus hijas e hijos con  flechas.
3ª- Níobe quedó transformada en una roca que constantemente mana agua que, en realidad, son sus lágrimas.

Han acertado Isabel, nuestra seguidora más fiel, y los alumnos:
- Javier Muñoz. (3º ESO)
- Elam Uceda. (3º ESO)
- Adrián Villagrán. (1º Bach.)
- Icíar Calvo. (4º ESO)
- María Labrador. (3º ESO)
- Adrián Garrido (1º Bach.)
- Alba Herráez (4º ESO)
- Jesús Martínez (3º ESO)
- Yanela Astudillo (3º ESO)
- Silvia Cerrato (1º Bach.)
- Enrique Hernangómez (4º ESO)
- Guisela Salazar (1ºBach.)

miércoles, 3 de octubre de 2012

Enigma -1



Era hija de Tántalo, aquel que por sus crímenes fue castigado eternamente en el Tártaro a ser tentado con comida y bebida sin obtener nunca satisfacción.
Recibió un durísimo castigo por burlarse de una de las amantes de Zeus, madre de dos dioses.

La Esfinge de Tebas (Grecia), de donde precisamente ella era reina por ser la esposa del rey anterior al padre de Edipo, quiere saber:

1º- ¿De qué mujer estamos hablando?
2º- ¿Quiénes llevaron a cabo el castigo y en qué consistió?
3º- ¿Cómo terminó ella al ver lo ocurrido?

Tenéis para contestar mediante el correo hasta las doce de la noche del miércoles 17 de octubre.

¡ÁNIMO! ¡VERÉIS QUÉ FÁCIL ES!



martes, 10 de enero de 2012

Solución al Enigma-6

En la mitología griega  la ambrosía era la comida de los dioses y el néctar, según los primeros poetas como Homero, el vino o bebida de los dioses, que les era servido por Hebe primero y después por Ganimedes, y que se describía como de color rojo. Como el vino de los mortales, se mezclaba con agua cuando iba a beberse.
Parecía que nacían entre los cuernos de la cabra Amaltea, la que crió a Zeus.

De todas formas se cree que originalmente ambos términos no estaban diferenciados y algunos escritores  entendían a veces por néctar un bálsamo aromático que prevenía la descomposición de los cuerpos orgánicos (Tetis, por ejemplo, evitaba que el cuerpo de Aquiles se corrompiese ungiéndolo con ambrosía y néctar). Otros piensan que el néctar y la ambrosía originalmente no eran más que diferentes formas de la misma substancia: la miel, considerada como un rocío, como maná caído del cielo, que se usaba como comida y como bebida.




Hebe (Ἥβη ) era la personificación de la juventud, descrita como hija de Zeus y Hera y era una divinidad con el poder de rejuvenecer a los ancianos. Según la Ilíada, era, además, la ayudante de los dioses pues llenaba sus copas con néctar.

El troyano Ganímedes fue secuestrado por Zeus en el monte Ida, en Frigia, mientras pasaba allí el tiempo cuidando un rebaño de ovejas.  Zeus lo vio, se enamoró de él casi instantáneamente y, enviando un águila o transformándose él mismo en una, lo llevó al monte Olimpo. Allí sustituyó en sus labores a Hebe haciendo de "copero o camarero" para los dioses.



El rey Tántalo era invitado a menudo por Zeus a la mesa de los dioses en el Olimpo. Pero él, jactándose de ello entre los mortales, fue revelando los secretos que había oído en la mesa y, no contento con eso, robó algo de néctar y ambrosía y lo repartió entre sus amigos mortales.




Pero es que, además,Tántalo quiso corresponder a los dioses y les invitó a un banquete. Cuando la comida empezó a escasear, decidió ofrecer a su propio hijo Pélope y así lo descuartizó, coció sus miembros y los sirvió a los invitados. Los dioses, que habían sido advertidos, evitaron tocar la ofrenda. Sólo Deméter, trastocada por la reciente pérdida de su hija Perséfone, «no se percató de lo que era» y se comió su hombro izquierdo. Zeus ordenó a Hermes que reconstruyera el cuerpo de Pélope, sustituyendo su hombro por uno forjado de marfil por Hefesto y las Moiras le dieron vida de nuevo.

Tántalo fue castigado a permanecer eternamente en el Tártaro sintiendo muchísima hambre y sed pero sin poder saciarlas nunca pues las ramas cargadas de frutas que colgaban sobre él subían al intentar cogerlas y el agua que tenía aparentemente a su alcance, se retiraba cuando pretendía beber.



Las respuestas al Enigma son:

1ª- Los alimentos que servía Hebe a los dioses eran el néctar y la ambrosía.
2ª- El troyano que sustituyó a la diosa de la juventud en su tarea fue Ganímedes, al ser raptado por Zeus.
3ª- El rey que robó néctar y ambrosía  y los repartió entre sus amigos fue Tántalo, quien, además, ofreció a su hijo Pélope en un banquete a los dioses. Por ello, permanece en el Tártaro sin poder saciar ni su hambre ni su sed.


Y han acertado, además de Isabel:

1- Inés V. (3º ESO) IES Pérez Galdós

2- Alba H. (3º ESO) IES Pérez Galdós
3- Jimena N. (3º ESO) IES Pérez Galdós


¡ GRACIAS CAMPEONAS !